BIGÜENZO (1.287 m)(Cantabria)

Situados en el extremo meridional de Cantabria, los mágicos parajes de los valles de Campoo y Valderredible, que abrazan el nacimiento y los primeros pasos del río Ebro nos ofrecen numerosos atractivos entre tradicionales aldeas casi deshabitadas y un entorno paisajístico de excepcional belleza se podrán admirar algunas de las mejores iglesias románicas o las originales y sorprendentes ermitas rupestres, excavadas en la roca por los primeros cristianos que poblaron la zona, pero, al mismo tiempo, se podrá disfrutar de la mejor estación de esquí de la cordillera Cantábrica, así como de las orillas del embalse del Ebro, el mar interior de Cantabria.

IBILIBIDEA /FITXA TEKNIKOA

    • Mapa:

ITINERARIO
Para comenzar esta travesía nos desplazaremos hasta la pequeña localidad de Aldea del Ebro (840 m), este pequeño núcleo pertenece al municipio de Valdeprado del Río (Cantabria). La localidad se encuentra a 840 metros de altitud sobre el nivel del mar, y a 4,8 kilómetros de la capital municipal, Arroyal. En el año 2012 contaba con una población de 9 habitantes (INE).
Cabe destacar que Aldea de Ebro fue declarada en el año 2002 “bien de interés cultural con la categoría de conjunto histórico”. En esta localidad puede verse un bello conjunto parroquial románico, uno de los más destacados del Campoo.
Comenzamos el recorrido en el puente de los Riconchos (780 m), situado a escasos 300 metros del pueblo, punto este donde el bus puede estacionar y dar la vuelta. Caminaremos por la carretera CA-742 en dirección al centro del pueblo, tras llegar al pueblo giramos a la dcha… para salir a una pequeña plaza, aquí nos topamos con un bar y un poste del GR 99, desde este punto caminaremos por la pequeña calle pegada al bar (Izq) y que sin darnos cuenta nos saca del pueblo, dejamos el asfalto para adentrarnos en el camino de San Miguel, un camino de tierra que se adentra en el bosque y que se encuentra bastante embarrado, si no deseamos tomar ese camino saldremos por la campas exteriores del bosque siguiendo la trazada de los todoterrenos, cualquiera de las dos son viables y en constante y cómoda subida nos sitúa en el pequeño promontorio (Elevación del terreno o monte de poca altura) de la Costariza (1.101 m), una vez en el tomaremos dirección (SE) hacia el paraje del Somo (1.100 m), aquí las pistas y cortafuegos ganan terreno, tomaremos una de ellas que entre un bosque de pinos nos lleva directos a la despejada cima del Bigüenzo, fácilmente distinguible por tener una pequeña caseta y antena en su cumbre, la cima nos depara muy buenas panorámicas (Embalse del Ebro, Alto Campoo, la Montaña Palentina y Valderredible-La Lora). El monte Bigüenzo se halla rodeado de pinares por los que discurren multitud de pistas forestales y de arrastre de troncos que pueden llevarnos a confusión con facilidad.
La cima del Bigüenzo con sus 1.287 m. es la máxima altura de un área montañosa extensa que separa las tierras del embalse de Ebro (Campoo de Yuso) del valle de Valderredible. El macizo aparece seccionado en dos partes por el rio Ebro dejando cumbres de altitud similar y siempre por encima de los 1.200 metros elevadas sobre ambas orillas. Pese a que Bigüenzo (1.287 m) es la cumbre más elevada que encontramos entre las Penas de Amaya (1.377 m) y la cordillera Cantábrica.
Tras la foto de rigor proseguimos nuestro caminar, tomaremos la pista que va en dirección (N) y que se adentra en el pinar, esa pista sale a un cruce aquí se nos aparecen tres pistas, tomaremos la central que entre una masa de pinos nos lleva a otro cruce mayor ya en zona despejada, aquí nos topamos con el GR 99.1 el cual seguiremos en dirección (N). Transcurridos unos cientos de metros y en una gran curva dejaremos el GR para tomar una pista que sale a nuestra dcha… la pista se vuelve sendero y se adentra en un gran hayedo, esa senda nos lleva directos entre un robledal a la caseta o cabaña de Hijedo (1.040 m), situada en territorio Burgalés, una gran mansión que data de finales del s.XIX encuadrada por torres, que posee una capilla anexada. A pocos metros encontramos un «Panel Informativo» sobre el «Monte Hijedo» que nos habla de la flora y de la fauna.
Desde la cabaña de Hijedo caminaremos en dirección (S) siguiendo las marcas del PR BU-30 “Sendero del Monte Hijedo”, este sendero nos permite conocer uno de los robledales de roble albar más extensos y mejor conservados de la cornisa cantábrica. Una vez que estamos en el sendero balizado lo seguiremos hasta llegar a un cruce, tomaremos el desvió de la Izq… que nos lleva hasta Boca del río, el sendero tras llegar a un mirador natural se adentra en el barranco, cambiamos el sentido de dirección y ahora el sendero camina en dirección (N) entre un bosque mixto de roble albar, hayas, tejos, alisos, abedules, avellanos, acebos, cornejos y arándanos, pasando por los arroyos de La Varga, La Corteza y La Teja.
El camino está bien marcado con marcas amarillas y blancas, como PR que es. Debemos tener cuidado, ya que un manto de hoja de roble cubre el camino en determinadas épocas, y podemos perder el sendero.
Dejado atrás el barranco salimos a terreno despejado, una pista amplia nos lleva directos a la carretera o camino de Bustidoño a Santa Gadea, una vez en la carretera nos dirigiremos hacia el pueblo de Santa Gadea de Alfoz (900 m), para llegar a la pequeña localidad tenemos dos opciones una directa que es seguir la carretera o camino de Bustidoño a Santa Gadea u otra más montañera que es adentrarse en la planicie despejada de Orcacia siguiendo las rodadas de los todoterrenos y los caminos que existen en la planicie, ambas nos llevaran en dirección (N) sin pérdida ninguna al pequeño pueblo, una vez en Alfoz de Santa Gadea (900 m) cruzaremos entre sus casas y calles para salir (N) y tomar una pista parcelaria hacia el Acebo y la ermita de Santa Águeda (880 m). Las pistas parcelarias abundan y con ellas los cruces, tendremos que tomar el sendero y cruce correcto si no queremos añadir unos cuantos kilómetros de más a nuestro recorrido, como pequeña referencia desde la pequeña localidad de Alfoz de Santa Gadea buscaremos la ermita de Santa Águeda y luego seguir el curso del arroyo de Pradepared que desemboca en la cola del embalse, esta cola llega al valle de Valdebezana, una vez en las aguas del embalse cruzaremos el puente (840 m) que nos lleva a la otra orilla por la pista principal llegaremos a la carretera BU-642 la cual cruzaremos con mucha precaución y seguiremos de frente por la calle o carretera de Vistalegre,  unos letreros nos indica la dirección hacia la estación de FEVE situada en el Barrio de Virga, punto este donde nos recogerá el bus y donde damos por terminada esta travesía.
Muy cerca de aquí y a escasos metros se encuentran las playas naturales de fina arena, en la orilla sur del embalse del Ebro, Arija mantiene vivo el recuerdo de los gloriosos tiempos en que fuera un enclave industrial de primera magnitud, cuando todavía no existía el embalse y cuando la arena estaba allí, pero todavía no había playas. En una zona de montaña y clima frío, en las inmediaciones de la Cordillera Cantábrica, en donde el río Ebro da sus primeros pasos hacia el lejano Mediterráneo, en la llanura de La Virga, la pequeña población de Arija vivió durante siglos una historia similar a la de los pueblos vecinos. Pueblos en los que su escasa población vivió durante siglos del producto obtenido en sus campos y sobre todo de la ganadería para la que cuenta con abundantes pastizales. El siglo XX fue un siglo de grandes esperanzas pero también de decadencia para el que fuera hasta 1928 un pequeño enclave rural perteneciente al Alfoz de Santa Gadea.